El turismo en Alicante tiene mucho más que ofrecer aparte de sol y playa. En esta comunidad existe el conocido Parque Natural Macizo de Montgó, declarado como tal en 1987, que se encuentra situado en la comarca de Marina Alta, al norte de la provincia alicantina, repartido entre Jávea y Denia y su extensión abarca unas 2500 hectáreas.

La Ermita De Pare Pere

Su visita, obligada para los amantes del senderismo y la naturaleza, no dejará indiferente a todos aquellos turistas que deseen respirar aire fresco en un entorno cuidado.

Un paraje lleno de contrastes

El Parque Natural de Montgo combina la belleza del mar con la imponente naturaleza de su macizo calizo que se erige sobre la costa a una altura máxima de 753 metros. En cuanto a la flora que allí se puede encontrar, se estima que existen más de 600 especies endémicas, convirtiéndose así en un referente botánico importante dentro del panorama nacional.

En el camino desde la costa hacia la cima existen varios atractivos de gran impacto visual como es el caso de las cavidades que allí se encuentran, siendo la principal y más bonita la llamada Cueva del Agua. Asimismo, para disfrutar del paisaje en todo su esplendor, se recomienda llegar a la cima y pararse a disfrutar divisando la isla de Ibiza.

Tenga especial cuidado si camina cerca de los acantilados, ya que es una ruta también bastante recomendada pues podrá observar la riqueza de fauna existente, como la gaviota patiamarilla, aves rapaces, córvidos, águilas, halcones, búhos reales y cernícalos. Igualmente, entre toda la extensión del parque se puede disfrutar de una gran variedad de mamíferos como el jabalí, el tejón, el lirón, el zorro, la comadreja o la jineta. Asimismo, si presta especial atención, también se podrá percatar de la existencia de reptiles como lagartos y culebras.

Y para los amantes de la arqueología y de la historia, el parque también cuenta con vestigios de la Edad Antigua y ruinas de infraestructuras arcaicas. Es el caso del contraste entre los restos de los poblados ibéricos y los emplazamientos árabes. También existe una zona donde se encuentran las cuevas prehistóricas y de la que existe la creencia de que se tratan de refugios de las comunidades agrícolas por los restos allí encontrados.

Por último, pero no menos importante, un dato curioso: se corresponde con la utilización de las cuevas, por un lado por parte de los romanos para abastecer de agua a un retén de su ejército, y por otro, por parte de los árabes que llegaron a construir una presa para su almacenamiento y varias redes de acequias para su distribución.

En definitiva, una visita obligatoria sobre todo cuando no se sabe que visitar en Alicante. Además existen varias maneras de acceder al parque de las que bien te pueden informar en el parking del aeropuerto de Alicante.